Han pasado mas de seis meses desde que tomé el avión en el aeropuerto de Santiago. Quedan solo unos días antes que empiece oficialmente la primavera. Tengo dos estaciones en el cuerpo y al igual que cuando llegas a la cima de la colina y te sientas a descansar mirando el horizonte, pensé que es tiempo de hacer un recuento.
-años: 39, últimos treintitantos con muchos saludos y pocos abrazos, aqui se extraña el cariño a borbotones del sudamericano, solo me abrazaron Sindy y Germán, chileno de la pichanga de los miércoles que es solo de chilenos.
-corazón en proceso de reparación y contento: 1. Gracias negrita, sin ti sería todo más difícil.
-países europeos visitados: 4
-fotografias tomadas: 5486 parece que son muchas pero la verdad es que me gusta sacar fotos.
-deportes realizados: 3
-recetas de cocina nuevas: 6, el WAP belga se lleva el premio de lo más raro, el charquican lo mas simple y con mejor recepción en la única comensal.
-kilos ganados y perdidos: 9, tres para abajo cuando llegué, cuatro para arriba cuando llegó la familia y dos para abajo en estas semanas.
Se acabó el invierno, los días son tibios y corre una brisa templada por las tardes, 22 agradables grados, mucho sol. La gente todavía lleva bufandas y chaquetas, yo no se donde meterme la mía a eso de las 3 de la tarde. Barcelona se empieza a llenar de colores, y justo al final del invierno con un poco de frío encima celebran Carnaval. Ocurre siempre antes del miércoles de ceniza, pero nosotros en Viña ni nos enteramos por el famoso festival, yo celebraría más carnaval, pero en fin.
Ahi en Sitges, es donde hace cuatro meses fuimos a conocernos por primera vez, ahora recorremos las calles tomados de la mano, confundidos entre una multitud de alegría y fiesta que va celebrando el momento con nosotros.
Escribiré mas seguido, acercándome al día feliz de volver con ustedes a casa.
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